Uniformados de la policía se encontraban en labores de patrullaje cuando fueron reportados por la central de radio de que en una institución educativa de su jurisdicción se requería su presencia.
Al llegar al centro educativo, las directivas pusieron en conocimiento una situación de presunto expendio de sustancias psicoactivas al interior de la institución por parte de una estudiante.
La adolescente de 15 años cargaba una mochila y en su interior los policías hallaron 15 brownies, situación que pasó normal para los uniformados, pero al verificar dichos comestibles pudieron evidenciar que en su interior contenian marihuana según la Prueba de Identificación Preliminar Homologada (PIPH).
Ante la flagrancia por violación al artículo 376 del código penal, fueron dados a conocer sus derechos como persona aprehendida por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes y fue dejada ante la autoridad judicial competente junto con la sustancia.
Se adelantan las respectivas investigaciones con el fin de establecer si la menor estaba siendo instrumentalizada para la comercialización del estupefaciente dentro del plantel educativo.